Las infecciones urinarias pueden ocurrir en cualquier momento de la vida, desde recién nacidos hasta ancianos. Sin embargo, cuando se presenta en los bebés se vuelve más difícil darse cuenta de los síntomas, ya que aún no pueden comunicarse.
Aquí puedes encontrar síntomas de infección urinaria en el bebé con el fin de ser tratados a tiempo, no empeorar y causar complicaciones más graves. Ser conscientes de los siguientes signos y síntomas que pueden indicar que tu bebé está con una infección del tracto urinario:
-Llanto u otros signos de queja cuando orina;
-Falta de apetito;
-Fiebre;
-Irritabilidad;
– Orina con olor intenso;
– Orina con un color más oscuro de lo habitual.
Estos síntomas pueden aparecer juntos, con o sin fiebre. También hay casos de recién nacidos con infección urinaria que sólo presentan como síntomas fiebre, que hace más difícil su diagnóstico, ya que este es un síntoma común de muchos otros problemas de salud.
Los recién nacidos con menos de 5 meses presentes como síntoma principal de apetito y rechazo a la alimentación, especialmente debido a la irritabilidad que sienten. Incluso si tiene hambre, el bebé podría negarse el pecho o la botella.
¿Cómo diagnosticar una infección urinaria en bebé
Para diagnosticar una infección urinaria en un análisis de orina de bebé. Para los bebés que usan una bolsa de pañales adecuada para la recogida de orina. Esta prueba dirá si hay infección del tracto urinario, pero también, el microorganismo responsable. Esta información será esencial para definir el mejor tratamiento.
Cómo tratar la infección del tracto urinario en bebé
El tratamiento para la infección urinaria en bebé consiste en tomar antibióticos en jarabes 7, 10, 14 o 21 días, dependiendo del caso individual y el microorganismo responsable. Es esencial que el antibiótico se haga exactamente como el médico pediatra indica, hasta el último día.
También hay casos de bebés que tienen que ser hospitalizados, especialmente aquellos con menos de un mes, para recibir antibióticos por vía intravenosa. Durante el periodo de tratamiento el bebé debe beber líquidos en abundancia.
Además, debe cambiar los pañales muy a menudo para no permanecer mucho tiempo sucio, lo que facilita la entrada de microorganismos.