A veces, da la sensación de que el satélite de las pegatinas decorativas orbita siempre alrededor de alrededor de un mismo mundo: el de los bebés y los niños. Es verdad que ellos suelen constituir el experimento ideal para decorar cualquier pared, dado que con ellos los límites no están impuestos y los propios padres pueden permitir la ilusión de llenar de colorido un lugar; este colorido que, una vez se entra en la edad adulta, se suele perder en favor de una mayor discreción y unos gustos personales mucho más acotados. Con un niño, se puede convertir la cotidianidad en algo fantástico y lo fantástico puede llevarse al mundo terrenal; es lo que esperamos haber conseguido nosotros con nuestros fotomurales infantiles, y la verdad es que estamos bastante convencidos de haberlo conseguido.
Ahora que probablemente hemos logrado despertar su atención, y quizás también la de su propio hijo o hija, dé una vuelta por los diseños que presentamos; lo más probable es que los vea todos igual de coloridos y detallados, ya que éste ha sido uno de los mayores objetivos que hemos intentado cumplir. Nuestros fotomurales, en este campo, deben ser como un enorme fotograma desde el techo hasta el suelo de algún dibujo animado, posiblemente similar a este que tanto nos gustaba ver cuando también éramos pequeños. Al propio cachorro de la casa seguro se le despertará su propia imaginación y comenzará a volar con libertad si se ve placentera obligado en un entorno así, lleno de reyes y princesas, osos panda y abejas que dormitan, niños columpiándose y telescopios contemplando una luna muy coqueta. Encontrará que no son pocas las páginas que hemos dedicado a esto.
Vale la pena destacar lo sencillo que es diseñar para un público tan fácil de maravillar como lo es el de los niños, ellos, que esperan cada cinco de enero a los Reyes Magos y están convencidos de que Peter Pan existe. Para ellos, los fotomurales pensados para los infantes, no serán meros ornamentos, sino una parte esencial de sus ambiciosas y heroicas vidas. Porque la fantasía nunca tuvo límites, y mucho menos cuando eres joven, pobre del que quiera encerrar la fantasía una habitación, porque no cabe, se sale por todas las grietas que tiene oportunidad. A pesar de ello, las paredes bien decoradas siempre va a ayudar al niño a crecer emocionalmente y a desarrollar su propio mundo.
Por ir concluyendo, son una opción más que interesante para los más pequeños de la casa, una decoración económica y variable a corto plazo que hará las delicias de esos locos bajitos. Se pueden encontrar cantidades inmensas de foto murales con temas infantiles tanto en tiendas físicas como internet, desde la sagas más afamadas de Disney hasta los cuentos más característicos de la España rural. Una buena oportunidad para hacer felices a los más pequeños de la casa por un precio rídiculo, no la dejes escapar.