Hoy en día nos encontramos con muchos padres preocupados porque escuchan a sus hijos apretar tan fuerte las mandíbulas hasta hacer rechinar los dientes. Dan la impresión de estar a punto de romperse. Este hábito se produce regularmente por la noche y en odontología recibe el nombre de bruxismo infantil.
Entendemos tu preocupación por eso queremos hablarte sobre el bruxismo infantil. Lo primero, queremos que te tranquilices, el bruxismo en la etapa infantil es totalmente normal. Es un problema muy extendido, se calcula que entre 4 y 6 años hasta un 75% de los niños sufre de bruxismo. La mayoría de los niños deja de rechinar los dientes antes de cambiar los dientes de leche por los definitivos.
Igualmente tenemos que estar atentos, si el bruxismo infantil se alarga en el tiempo puede producir desgaste o incluso destrucción del esmalte de los dientes.
Además, este trastorno puede producir malestar en el niño, sin que encontremos un motivo claro, podrían quejarse de sufrir de dolores de cabeza, mandíbula, cuello u oídos.
Causas de Bruxismo infantil
- Causas psicológicas: con frecuencia los niños se ven sometidos a estrés y tensiones, tanto en el colegio como en el hogar, si a eso sumamos una actividad excesiva o incluso hiperactividad, los niños pueden responder con cierto grado de ansiedad que se refleja en el rechineo nocturno de los dientes.
- Causas físicas: el bruxismo infantil puede ser causado por algún diente mal posicionado, que pueda interferir en la forma de cerrar la boca. La aparición de dientes nuevos también puede ocasionar el rechinar de dientes. Se considera que la incomodidad que siente el niño cuando sufre de parásitos intestinales puede provocar intranquilidad y malestar, derivando en un rechinido de dientes.
Te recomendamos que tienes sospechas de que tu hijo pueda sufrir bruxismo infantil acudas a tu odontólogo para que evalúe el grado de bruxismo, a la vez que busque signos de desgastes o fracturas de piezas dentales. Él te hará las recomendaciones pertinentes y si hace falta te recomendará seguir un tratamiento que considere oportuno.
Tratamiento del bruxismo infantil
Dependiendo del grado de bruxismo en tu hijo el tratamiento indicado podría ser confeccionar y colocar una placa de acrílico llamada placa de relajación neuromuscular, se coloca para evitar el deterioro de los dientes. Esto frena el progreso de la lesión y los dolores de mandíbula, cabeza y oídos. Este tipo de tratamiento es muy efectivo, suele combinarse con técnicas de relajación.
La mayoría de los casos este tipo de patología tiene motivaciones psicológicas, que puede generarse debido a cambios de rutinas del pequeño como pueden ser mudanzas, nueva guardería, nacimiento de un hermano, que los padres se separan, entre algunas otras situaciones de estrés.
Es importante intentar ayudar a evitar todo el estrés posible al niño. Asegurarte de no alterar su estado sobre todo antes de ir a dormir. Evitar la televisión en ese momento y también ejercicios extenuantes.
Un baño caliente y relajante puede ser una buena idea antes de dormir. Es importante crear un ambiente tranquilo para el niño. Si notas que el nivel de estrés del niño es alto, podrías considerar la posibilidad de una psicoterapia.