Tetinas de biberón, una pequeña guía

Biberón anticólicos HabermanSepamos qué tipos de tetinas podemos encontrar en los establecimientos y cuáles son sus características funcionales más destacables.
La tetina pretende ser el sustituto del pezón del seno materno y es por esto por lo que se estudia para imitar su forma y su funcionamiento.
Se fabrica en dos materiales: caucho o látex, y silicona.
Existen tetínas con flujo constante Una tetina funciona correctamente cuando, al invertirse el biberón, la leche gotea a un ritmo regular y moderado.
Si el flujo fuese demasiado lento, el niño podría impacientarse; por el contrario, si fuese demasiado rápido, podría verse obligado a soltar el biberón para expulsar el exceso de leche.
Para conseguir que el flujo de leche sea constante, es muy importante compensar la salida de líquido con la entrada de aire.
De no ser así, después de algunas succiones, el flujo se interrumpiría, obligando al pequeño a detenerse para dejar entrar el aire a través de los agujeros de la tetina, libre de la presa a la que la sometería la boca del niño.
Para evitar que se produzcan estas pausas, se han estudiado válvulas que regulan el flujo.
Moviendo la arandela que fija la tetina, se consigue una entrada constante de aire en el biberón y se regula el flujo en diversas velocidades.
Con distintas formas y orificios Existen muy diferentes tipos de materiales Las tetinas pueden estar fabricadas en caucho o silicona.
El caucho es la goma natural que se extrae del látex de la corteza de algunos árboles.
Las tetinas fabricadas con este material son resistentes, blandas, muy elásticas, transparentes y de un color entre amarillo y ámbar.
La estructura molecular del caucho es higroscópica, es decir, tiende a absorber el agua.
Esto significa que, con el uso, la tetina de caucho se hincha, se vuelve opaca y absorbe los olores, por lo que resulta necesario sustituirla por una nueva.
La tetina, ya sea de caucho o de silicona, puede tener distintas formas, que se adaptan al arco del paladar del niño: redondeada o de cereza, anatómica, fisiológica o de gota.
También puede estar provista de: Un solo orificio, para un flujo de leche reducido.
Dos orificios o un solo orificio más grande, para un flujo ligeramente mayor.
Tres o más orificios, para un flujo aún más abundante.
un.
Solo orificio grande, para las primeras papillas y la leche con galletas.
Un orificio en forma de estrella, para las papillas más densas, como las harinas lácteas y las sémolas.
Si es necesario, es posible ensanchar un orificio pequeño, utilizando un utensilio adecuado.
Esta operación puede efectuarse sólo en tetinas de caucho, ya que las de silicona se pueden romper.
Un pequeño corte.
La tetina de tres posiciones puede proporcionar tres flujos diferentes, gracias a su corte, que, en función de cómo se coloque en la boca del niño, se abre dejando pasar una cantidad mínima, media o máxima de líquido.
De esta manera, la madre orienta la tetina en función de las necesidades.
La silicona es un producto químico de color blanco transparente.
No es tóxico y es bastante blando y elástico.
No absorbe ni el agua, ni los olores, ni los sabores, y mantiene inalterada su forma con el tiempo.
Sin embargo, tiende a adoptar el color de los alimentos con los que entra en contacto y, si se corta, se puede estropear.
Por consiguiente, es poco adecuada para los niños a los que ya les han despuntado los primeros dientes.