La importancia de la higiene del bebé

La higiene del bebé de meses se compone de pasos básicos y fáciles  El baño es fundamental, si es posible debe efectuarse todos los días y el otro es el cambio de pañales que se lleva a cabo 6 veces al día. En este artículo te hablaremos de estos dos pasos  detallando lo más importante.

Los elementos claves para la higiene del bebé

  • Bañera (para el baño).
  • Palangana
  • Jabón sin perfume ni colorante. El más recomendable es el de glicerina neutro.
  • Champú para el bebé
  • Hisopos
  • Talco para bebé.
  • Termómetro
  • Algodón o toallitas húmedas.
  • Aceite o crema de bebé.
  • Vaselina esterilizada
  • Alcohol al 60%
  • Eosina en solución acuosa al 1%
  • Óleo calcáreo
  • Dos toallas para envolver al niño. Para secarlo
  • Tijera para cortar las uñas del bebé.
  • Un cepillo de cerda para el cabello.

El baño: este es imprescindible  en el momento de la higiene del bebé. Pero los bebés disfrutan del agua tibia y también los relaja. Así que usted puede utilizarlo a su favor para convertirlo en un espacio de juego y motivación. Autorice que el niño patalee en la bañera llévele juguetes flotantes para que se entretenga en el agua etcétera.

¿Cómo debo bañar al bebé?

Coloque  al alcance de las manos  todo lo que va a utilizar jabón, champú y toalla.

En los primeros baños trate de estar en presencia de otra persona por si necesita algo.

Compruebe  que en la habitación no haga menos de 20 grados. Fíjese también que el agua de la bañera este a unos 37 grados o unos mas no mucho. Una manera de saber bien la temperatura es utilizando el termómetro.

Antes de tomar al bebé e introducirlo en la bañera, lave sus manos.

Desnude  completamente al bebé, sin dejar ninguna prenda.

Limpie la zona anal y genital con un algodón mojado de manera tal que no se ensucie  el agua de la bañera.

Luego  sobre una superficie  estable e impermeable enjabone el cuerpo del bebé para ello puede utilizar una esponja y una vez que tenga practica con las manos. Haga otro tanto con el cabello usando champú.

Cuando ya esté enjabonado, levante al bebé pasando su mano izquierda por la nuca y la derecha por debajo de los tobillos y métalo despacio en el agua.

Estando el bebé en el agua tenga al bebé firme y enjuáguelo.

Saque al bebé de la bañera, envuélvalo en una toalla y séquelo de manera suave.

Tenga cuidado al sacar bien lo pliegues axilas, inglés, rodillas, etcétera.

Cuando la piel este bien saca, comience a entalcar todo su cuerpo con cuidado de que no sea demasiado talco. Y por último vístalo.

Los puntos clave de la higiene del bebé

Ojos: pase  en las pestañas un algodón o un hisopo con suero fisiológico desde el ángulo interno del ojo hasta el externo.

Orejas: limpie con un hisopo él pabellón   y la parte externa pero no el fondo, ya que es muy frágil.

Nariz: acá hay pequeñas pilosidades  que expulsan hacia el exterior partículas y mucosidad. Con un hisopo húmedo de suero fisiológico limpie la zona que rodea la fosa nasal, en forma inmediata sin penetrar más.

Uñas: trate de mantener las uñas cortas esto ayudara a su higiene. Eso no será necesario durante el primer mes, después podrá hacerlo mientras duerme.

Dientes: una vez que los dientes han hecho erupción es favorable lavarlos una vez a la semana con un hisopo humedecido en suero fisiológico.

Cambiar los pañales

Usted deberá cambiar los pañales y limpiar la zona, unas seis veces por día aproximadamente.

Durante las primeras semanas será recomendable no utilizar agua sino solamente aceite, ya que la piel del recién nacido es muy frágil. Pase un algodón  húmedo con aceite y páselo por la zona genital y anal hasta que quede sumamente limpio. Seque en forma suave la zona con una gasa esterilizada y antes de ponerle el pañal colócale un poco de talco.

Después de las primeras semanas podrá higienizarlo con agua tibia y jabón de glicerina.